LOS QUE DECIDEN QUÉ ES ARTE Y QUÉ NO

Flickr.com es una página web que permite almacenar, buscar, compartir y desde hace poco, vender fotografías y vídeos entre personas de todo el mundo. Sus posibilidades son innumerables. Los pequeños fotógrafos pueden aprender de los grandes, unas culturas pueden ver las miradas de otras. La originalidad, la técnica o el sentimiento que transmiten es premiado por los propios usuarios que pueden comentar y elegir sus favoritas.

El funcionamiento de esta red de documentos gráficos parece extraordinario. Quizá la mayoría de sus usuarios no hayan leído “las normas de la comunidad”. Porque si lo hubieran hecho, más de uno se lo habría pensado antes de formar parte de Flickr.

Esta diplomática página no habla en ningún momento de censura. Sin embargo, sí de la “responsabilidad de categorizar tu propio contenido”, es decir, después de subir tus fotos tendrás que clasificarlas en tres categorías:

“Seguro: Contenido adecuado para una audiencia pública global.

Moderado: Si no estás seguro de si tu contenido es adecuado para una audiencia pública global, pero consideras que no debe ser restringido en sí, esta categoría es para ti.

Restringido: Éste es un contenido que probablemente no mostrarías a tu mamá, y definitivamente no debería estar al alcance de los niños.” FUENTE: http://www.flickr.com/help/filters/

La página te da la oportunidad de que tú mismo clasifiques los contenidos cargados, siempre por motivos de seguridad, de respeto a una comunidad heterogénea que no tiene por qué pensar lo que tú piensas y sobre todo, de respeto a los niños:

“Si dudaras en mostrar tus fotos o videos a un niño, a tu mamá o al tío Roberto, eso significa que debes filtrarlas. Por lo tanto, hazte esa pregunta cada vez que cargues tu contenido y modéralas de la manera correcta. Si no lo haces, es probable que suceda una de las dos cosas siguientes. El personal de Flickr revisará y luego moderará o cancelará tu cuenta.” FUENTE: http://www.flickr.com/guidelines.gne

Nunca había escuchado que alguien hubiera tenido algún problema de este tipo en Flickr hasta este año. A un amigo fotógrafo le mandaron un mensaje advirtiéndole de que ciertas fotografías deberían estar clasificadas como “restringidas” por ser desnudos. No podía creérmelo. Las había visto y no eran pornográficas ni ofensivas para nadie. De hecho, podéis juzgar vosotros mismos porque después de tenerlas un tiempo “restringidas”, las volvió a colgar como “material seguro”.

http://www.flickr.com/photos/emiliojimenez/sets/72157624898564336/with/4965415887/

Es cierto que una página web con unos 40 millones de usuarios que suben diariamente millones de fotografías y vídeos, debe tener un control para que todo funcione correctamente. Pero ese control no puede llegar a la censura indiscriminada. ¿Quién ha escrito cuál es el límite entre la pornografía y el arte? Efectivamente, lo que para mí es bello para otra persona del mundo puede ser ofensivo. Pero para igualar gustos ya está la globalización y parecer ser que para decidir lo que es arte y lo que no, está Flickr. Y a los que no nos guste, sólo nos quedará “pegar nuestras fotos en las paredes de las calles” (como dice mi amigo Emilio) y así Internet no podrá censurarnos, aunque sí lo harán otros. Parece que no tenemos salida... Internet poco a poco está poniendo puertas al campo...

OTRO CASO SIMILAR QUE SALIÓ EN LOS MEDIOS

http://www.elperiodico.com/es/noticias/ciencia-y-tecnologia/20101213/red-social-flickr-censura-unas-fotos-sobre-cancer/622406.shtml


Estas declaraciones de la fotógrafa censurada Nati Martínez Ribera no tienen desperdicio:

 “El problema, creo, es que estamos en manos de empresas que nos imponen sus propias normas y valores, que a veces no son las nuestras. A nosotros nos da menos reparo un desnudo que la violencia, y a ellos no”, opina. En la misma línea se han mostrado compañeros de profesión que le han mostrado su apoyo personal como Paco Elvira, Tino Soriano o Laura Terré.

Colita se ha mostrado completamente “indignada” y ha calificado el caso de “pura ignorancia”. “¿Cómo van a comparar la valentía de una mujer que hace un trabajo positivo para ayudar a otras mujeres con la pornografía? Hay desnudos que no queda más remedio que enseñarlos. Lo que ocurre es que nos invade una ola de moralina derechista. Antes teníamos a un cura debajo de las faldas, a un guardia civil y a un juez. Y ahora tenemos al Flickr.”